El Reloj Nocturno

El reloj biológico o ritmo circadiano es el mecanismo que permite que todos los órganos y células se sincronicen entre sí, para lograr el correcto funcionamiento del cuerpo humano; de este modo, si existe algún desajuste o trastorno del ritmo, el mismo puede generar padecimientos y enfermedades en los seres humanos.

Los desajustes del reloj biológico se pueden generar por diversos factores tanto internos como externos. Los ritmos de vida que desafían las reglas usuales tienden a ser la principal causa de desajustes del ritmo circadiano, en este punto podemos hablar de aquellas personas cuyos trabajos o empleos son nocturnos o que realizan trabajos que necesiten cambios de turno; nos podemos referirnos a las personas que alteren de manera consiente los periodos de sueño.

Conoce el reloj que une a todos los seres vivos

Aparte de este, el síndrome del cambio de horario o el jet-lag, también es una de las principales causas, ya que obligamos al cuerpo a adaptarse a una nueva zona horaria de manera brusca.  En cuanto a factos internos, existen desajustes hormonales y proteínicos que conllevan a desajustes de ritmo de vida diario.

¿Qué consecuencias traen los trastornos en el reloj biológico?

Una alteración al reloj biológico puede generar problemas crónicos, entre ellos tenemos el aumento del riesgo de sufrir enfermedades degenerativas y trastornos metabólicos como el cáncer, la artritis y el mal de Parkinson. Los efectos que un descontrol del ritmo circadiano tiene en la secreción de la insulina puede aumentar la posibilidad de sufrir condiciones relacionadas con el azúcar, como la diabetes y en el sistema nervioso puede dar pie a la depresión, el cansancio, la bipolaridad y la ansiedad.

Un descontrol puede ser considerado nocivo para el ejercicio de las funciones cognitivas del cerebro, afectando el proceso de aprendizaje, de orientación e incluso la memoria.

Para aquellas personas que sufren de desajustes en el reloj biológico, especialistas suelen recomendarle el sometimiento a diferentes tratamientos tales como las terapias de comportamiento para así regular los patrones de sueño y de alimentación o las terapias de luz brillante que utiliza la exposición a la luz con el fin promover el sueño o la vigilia; todo esto con el fin de mitigar el desajuste que tanto mal genera en nuestro bienestar.

GM